El tiempo detenido en un poema de Coral Bracho
Un poema donde existir es solo por un momento
¿Qué pasa cuando algo empieza a existir y luego desaparece?
¿Cómo nos afecta un momento que parece fuera del tiempo?
Esta semana traigo un poema que parece una escena mínima, casi cotidiana, pero que abre muchas preguntas. Coral Bracho nos sitúa justo ahí, con personajes que entran, se quedan y se desvanecen, mientras afuera llueve sin parar.
Como siempre, gracias por abrir el mensaje.
🎲 Personajes bajo otro tiempo
Lo que no es
comienza a ser con vehemencia.
Abre y enciende escenas,
las echa a andar. Bajan
los personajes y entran con soltura
a los cuartos. Prenden
la estufa y se hacen un té. Jalan sillas,
se sientan
y platican. Afuera la lluvia arrecia.
No hay paraguas
suficientes. Se quedarán.
Bajo este tiempo sin huellas
pasarán otra noche. Lo que es
ya no es.Coral Bracho
🎭 4 claves para leer el poema
Personajes bajo otro tiempo, de Coral Bracho, crea una escena cargada de intimidad y extrañeza. Desde las primeras líneas, el poema nos sitúa en un espacio donde algo comienza a existir: “Lo que no es / comienza a ser con vehemencia.” La idea de que algo surge desde la nada atraviesa todo el texto. No solo es la llegada de los personajes, sino la creación de un ambiente, de un momento casi teatral.
Los personajes entran, prenden la estufa, se hacen un té, conversan. Afuera, la lluvia arrecia y ellos se quedan, atrapados en este tiempo suspendido, “sin huellas”. La atmósfera de encierro es sutil, pero efectiva: no hay necesidad de describir grandes obstáculos, basta con la lluvia y la falta de paraguas para que comprendamos que estos personajes no se irán. Se quedarán “otra noche”, bajo este otro tiempo.
Llama la atención también la referencia al teatro: se mencionan “escenas” y “personajes” que “bajan” y entran con soltura a los cuartos, como si el poema fuera una obra que cobra vida por sí misma. Esa idea se refuerza con el ritmo casi visual de las acciones.
Y algo más profundo ocurre: el poema abre con el nacimiento de lo que no era, y cierra con la desaparición de lo que fue. Hay aquí un ciclo de aparición y desaparición que plantea una reflexión ontológica: lo que existe, deja de existir. Lo que fue, ya no es. El poema sugiere que la existencia es momentánea, casi efímera, como la escena que observamos. No hay permanencia, solo tránsito.
En cuanto a la forma, el uso del encabalgamiento es clave. Los cortes abruptos entre versos dejan verbos sin objeto inmediato —“Prenden / la estufa y se hacen un té”— o frases incompletas —“No hay paraguas / suficientes”— que parecen flotar, contribuyendo a esa sensación de tiempo suspendido, de acciones a medio hacer.
Este poema, breve pero intenso, nos invita a pensar en cómo habitamos el tiempo, en la fragilidad de lo que creemos sólido, y en cómo, al final, todo lo que es, deja de ser.
💬 Dilo aquí
¿Alguna vez has sentido que el tiempo se detiene, como les pasa a los personajes de este poema?
¿Cómo fue?
🔗 Poesía en línea
Entre las entrevistas que hay de Coral Bracho en Youtube, me parece que esta es de las mejores y más completas porque también trata de su otra gran pasión literaria: la traducción. En ella habla de sus influencias, discute el concepto de metáfora en relación con la traducción, habla sobre la palabra y su significado, entre otros temas.
Además, aquí te dejo más poemas de Bracho.
Y hasta aquí por hoy.
Si te quedaste pensando en esos personajes atrapados por la lluvia, me encantaría saber qué viste tú en ellos. ¿Leíste algo más entre líneas? Dilo aquí abajo, te leo.
Nos leemos el próximo sábado,
Jorge
Nos leemos maestro.